Vietnam
En el imaginario colectivo, Vietnam aparece inevitablemente asociado a los estragos de una cruenta guerra que se alargó dos décadas, siendo por primera vez documentada al detalle por los medios de comunicación y desatando sonadas protestas en todo el mundo. Y si bien no cabe duda de que la guerra de Vietnam marcó un antes y un después, no se puede reducir el carácter y la biografía de un pueblo a uno sólo de sus capítulos.
Entre sus costas y oníricas bahías – protegidas de invasores por una familia de dragones-, sus montañas sembradas de arrozales, sus selvas y sus fértiles llanuras se esconde todo un universo propio: coloridos templos y vistosas pagodas de un palpable sincretismo religioso, ciudades imperiales, medio centenar de etnias con su propia identidad, una delicada gastronomía, coquetos pueblos que fueron importantes puertos marítimos, metrópolis donde la tradición sigue mirando de frente a los altos rascacielos, y hasta el delta de unos de los ríos más icónicos del mundo dan personalidad a un país que seduce a quien lo visita.